Las funciones de la alimentación en el rendimiento deportivo son; aportar energía, regular el metabolismo, formar y reparar tejidos.
El hiit es un tipo de ejercicio que demanda una elevada cantidad de energía y una alta intensidad. Por eso, en este tipo de ejercicios es más probable que aparezca la temida fatiga de manera temprana.
Las posibles causas de aparición de la fatiga serían:
- Agotamiento del glucógeno muscular
- Hipoglucemia
- Deshidratación
- Hiponatremia
Para prevenir esta fatiga tendremos que seguir un correcto entrenamiento e ir adaptando nuestra intensidad poco a poco. No es lo mismo, el rendimiento de una persona que se inicia en el hiit que una persona ya entrenada. También, para retrasar la fatiga es conveniente llevar una alimentación e hidratación adecuadas para cubrir los requerimientos de cada persona.
Recomendaciones pre-ejercicio
3 horas antes de hacer ejercicio, elaborar una comida baja en grasas para facilitar la digestión. En esta comida evitaremos alimentos que induzcan la formación de gases como coles de Bruselas, coliflor, brócoli, col rizada (…), provoquen ardores (picantes o ácidos) y sean altos en fibra.
Si en cambio, la alimentación pre-entrenamiento es baja en carbohidratos, alta en grasas y proteínas, podría ser poco apetecible, causar alteraciones digestivas (hinchazón abdominal, gases…), irritabilidad, vértigos o cansancio.
Otro punto interesante sería evitar cargas elevadas de azúcares simples. En esta comida ya que pueden provocar una posterior hipoglucemia que no será beneficiosa para la práctica deportiva.
15-30 minutos antes de la actividad física sería interesante mantener una buena hidratación. Aunque el hiit se basa en una serie de ejercicios que se realizan a alta intensidad, tenemos que tener en cuenta que el tiempo de duración es corto y por lo tanto, no vamos a mantenernos a una elevada intensidad durante mucho tiempo. Es decir, las necesidades de micronutrientes como el sodio, no se verán aumentadas como sí lo estarían en otras prácticas deportivas de mayor duración.
Para finalizar, os dejo unos ejemplos de comidas pre-hiit que podríais hacer para prevenir la fatiga en vuestros entrenamientos.
- Ensalada de patata cocida con cebolleta, tomate y huevos cocidos.
- Cus cus con zanahoria cocida y pechugas de pollo a la plancha.
- Dorada al horno con boniato y chalotas.
Dentro de que estos platos solo son unos ejemplos, siempre habría que tener en cuenta las necesidades y preferencias de cada persona, por lo que quizás esto podría variar de una persona a otra y en una misma persona dependiendo del momento y sus objetivos. Por lo que, si tenéis alguna duda, lo más recomendable es que vuestra nutricionista pudiera ayudaros según vuestra demanda.